miércoles, 10 de septiembre de 2008

QUE TIPO DE VASO ERES?

INTRODUCCIÓN
En una casa siempre hay diferentes tipos de vasos. Usualmente las amas de casa los tienen organizados, es decir, un tipo de vaso para cada ocasión, algunos son para los eventos más prestigiosos y otros para las actividades de menor importancia.

Es posible que en la familia algunos miembros tengan un vaso específico para su uso personal, esto quiere decir que, aparte de la ocasión en que va a ser usado el vaso, también se toma en cuenta quién lo va a usar.

Con relación a esto y moviéndonos un poco más a lo espiritual, podemos decir que en el Reino de Dios existen diferentes tipos de personas, los cuales podemos denominar como vasos, ahora bien, no sé qué viene a tu mente al escuchar la pregunta ¿Qué Tipo de Vaso Eres? Tal vez pienses en Cristal, Plástico, Barro, etc. Cada uno de estos tiene su ventaja y su desventaja.

El Cristal tiene la especialidad de ser usado en eventos prestigiosos, es representable y a veces cómodo para usar, pero tiene la desventaja de ser muy frágil, se rompe con facilidad al caer y además cualquier pequeño sucio es notorio. El Plástico, es resistente a las caídas, pero se consume rápidamente en el fuego. Ahora bien, el tipo de vaso en que nos queremos enfocar es el barro.

El Barro es especial ya que en su elaboración es creado con mucho cuidado, es el más procesado y para llevar a cabo su terminación, ésta tiene que quedar a la perfección. Dios nos compara con el barro en Jeremías 18:1-6, ya que conoce nuestras imperfecciones, pero está en la entera disposición de darnos la forma correcta, pero nosotros decidimos cuándo descendemos a la casa del alfarero.

Esta breve reflexión está dirigida a todo creyente que sienta que puede ser usado por Dios de alguna forma, en alguna área, en alguna ocasión, dirigido a aquellos que saben que fueron llamados con un propósito, aún si no saben cuál es ése propósito, pero tienen la certeza de que son útiles para Dios y su reino, es decir, a todo aquel que sienta ser Un Vaso En Las Manos Del Alfarero.


BASES A USAR:
Ø JEREMÍAS 18: 1 La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehová, diciendo: 2 Levántate y desciende a la casa del alfarero. Allí te haré oír mis palabras. 3 Descendí a la casa del alfarero, y he aquí que él estaba trabajando sobre la rueda. 4 Y el vaso de barro que hacía se dañó en la mano del alfarero, pero el alfarero volvió a hacer otro vaso según le pareció mejor. 5 Entonces vino a mí la palabra de Jehová, diciendo: 6 ¿No podré yo hacer con vosotros como hace este alfarero, oh casa de Israel?, dice Jehová. He aquí que vosotros sois en mi mano como el barro en la mano del alfarero, oh casa de Israel.

Ø ROMANOS 9: 20 Antes que nada, oh hombre, ¿quién eres tú para que contradigas a Dios? ¿Dirá el vaso formado al que lo formó: Por qué me hiciste así? 21 ¿O no tiene autoridad el alfarero sobre el barro para hacer de la misma masa un vaso para uso honroso y otro para uso común? 22 ¿Y qué hay si Dios, queriendo mostrar su ira y dar a conocer su poder, soportó con mucha paciencia a los vasos de ira que han sido preparados para destrucción? 23 ¿Y qué hay si él hizo esto, para dar a conocer las riquezas de su gloria sobre los vasos de misericordia que había preparado de antemano para gloria, 24 a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo de entre los judíos, sino también de entre los gentiles? 25 Como también en Oseas dice: Al que no era mi pueblo llamaré pueblo mío, y a la no amada, amada. 26 Y será que, en el lugar donde se les dijo: "Vosotros no sois mi pueblo", allí serán llamados hijos del Dios viviente.

Ø 2 Corintios 4:7: Con todo, tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros.

Ø 2 REYES 4: 2 Y Eliseo le preguntó: ¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en casa. Ella respondió: Tu sierva no tiene ninguna cosa en casa, excepto un frasco de aceite. 3 El le dijo: Ve y pide prestadas vasijas de fuera, de todas tus vecinas, vasijas vacías; no pidas pocas. 4 Luego entra, cierra la puerta detrás de ti y de tus hijos, y vierte el aceite en todas esas vasijas. Y cuando una esté llena, ponla aparte. 5 Ella se apartó de él y cerró la puerta detrás de sí y de sus hijos. Ellos le traían las vasijas, y ella vertía el aceite. 6 Y sucedió que cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme otra vasija. Y le respondió: No hay más vasijas. Entonces el aceite cesó. 7 Luego ella fue y se lo contó al hombre de Dios, quien dijo: Anda, vende el aceite y paga tu deuda, y tú y tus hijos vivid de lo que quede.

1. VASO DE HONRA
Romanos 9:21: ¿O no tiene autoridad el alfarero sobre el barro para hacer de la misma masa un vaso para uso honroso y otro para uso común?

- Es posible que hayamos pensado que algunos hermanos no están haciendo el trabajo que deberían hacer, pero en realidad hay personas que hacen un trabajo especial fuera de nuestra vista, se puede decir que hacen uno de los trabajos más fuertes, ya que son usados en lugares muy delicados

- Esto no quiere decir que todo aquel que no trabaja continuamente es un vaso de honra, este tipo de vaso se distingue de los demás porque posee un brillo especial (Gracia) y contiene dentro un vino nuevo (Unción).

- Son personas que están reservadas para una ocasión especial, aquellos que sin mucho alboroto y sin mucho de que hablar nos dan una palabra de parte de Dios, un consejo edificante o quizás una reprensión restaurante, “Dios está necesitando este tipo de vaso en las iglesias”.

2. VASO DE USO COMÚN
Romanos 9:21: ¿O no tiene autoridad el alfarero sobre el barro para hacer de la misma masa un vaso para uso honroso y otro para uso común?

- Es común ver en nuestras iglesias personas que no les gusta ir a ciertos lugares o tal vez a ninguno, pero entendemos que un vaso de uso común es aquel que está siempre listo para ser usado.

- Aquel que no importando la ocasión, el lugar o la persona que lo necesite siempre está presto para servir. A diferencia del vaso de honra, el de uso común es usado en áreas más sencillas y con más frecuencia.

3. VASO DE IRA
Romanos 9:22: ¿Y qué hay si Dios, queriendo mostrar su ira y dar a conocer su poder, soportó con mucha paciencia a los vasos de ira que han sido preparados para destrucción?

- Este tipo de vaso aparentemente no es frecuente su uso, pero en sus debidas ocasiones han sido utilizados. En el momento en que Dios quiso derramar su ira sobre el pueblo, la soportó, es decir, no usó esos vasos de ira que tenía preparado para destrucción.

- Sino que mejor usó los vasos de misericordia que estaban preparados de antemano para extendernos la salvación a los que estábamos fuera de ese plan y así mostrar su gloria de la mejor manera.


4. VASO DE MISERICORDIA
Romanos 9:23-24: ¿Y qué hay si él hizo esto, para dar a conocer las riquezas de su gloria sobre los vasos de misericordia que había preparado de antemano para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no sólo de entre los judíos, sino también de entre los gentiles?

- Cada individuo es un vaso en el cual Dios ha derramado su misericordia y ha mostrado claramente las riquezas de su gloria. Con la muerte y resurrección de Cristo, no sólo se nos ha extendido la salvación a la humanidad completa, sino que se nos ha llamado para usarnos, ya no solamente de entre los judíos sino también de entre los gentiles.

- Desde el principio Dios pensó en nosotros (los gentiles), por lo cual le dijo a Abrahán En Ti Serán Benditas Todas Las Naciones. Podemos darnos cuenta que Dios siempre tiene una solución que favorece al hombre y que sus planes giran a nuestro favor, esto es por Gracia y Misericordia.


5. VASO LIMPIO – VACÍO
Efesios 5:18: Y no os embriaguéis con vino, pues en esto hay desenfreno. Más bien, sed llenos del Espíritu.

- Este tipo de vaso se refiere a las personas que están disponibles para ser usadas, pero no están dispuestas internamente, se quedan en el mismo sitio limitándose a la idea de que están limpios y con eso suficiente, no procuran llenarse, ni entregarse en las manos de aquel que puede llenarlos para usarlos.

- Cuando tenemos sed y pedimos agua, no queremos que nos den un vaso vacío, aunque esté limpio no nos va a desempeñar en lo que necesitamos. Es muy importante estar limpios y verse brillantes, pero en este tiempo se necesitan vasos llenos que refresquen al pueblo.

- Quizás desde hace mucho tiempo hemos estado llenándonos de agua o tal vez de vino (entender espiritual). Pero de ahora en adelante procuremos que cada día el Señor derrame en nosotros una onza más de su Espíritu Santo, hasta llegar a la llenura del vaso. Cuando el vaso esté lleno, entonces rebosará y los que estén alrededor también recibirán.



6. VASO LIMPIO FUERA – SUCIO DENTRO
Mateo 23: 25¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque limpiáis lo de afuera del vaso o del plato, pero por dentro están llenos de robo y de desenfreno. 27 "¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque sois semejantes a sepulcros blanqueados que, a la verdad, se muestran hermosos por fuera; pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda impureza.

- Esta fuerte declaración de Jesús debe ponernos en alerta. Una cosa es estar limpios por fuera y vacíos por dentro, pero otra muy diferente es estar limpios por fuera y sucios por dentro.

- Esto es aún más peligroso, ya que, quien está vacío nada tiene, pero en el caso de estar sucios por dentro, es cuando existe hipocresía, engaño, traición o raíz de amargura dentro del corazón. A esto es lo que Jesús le llama sepulcros blanqueados.

7. VASO SUCIO – LLENO
Mateo 12:34: ¡Generación de víboras! ¿Cómo podréis vosotros, siendo malos, hablar cosas buenas? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.

- Nadie puede dar lo que no tiene. Este tipo de vaso se refiere a las personas que sin estar preparadas interiormente, intentan llenarse, pero en el momento de dar lo que tienen dentro, lo que dan al pueblo está contaminado y sucio.

8. VASO LIMPIO – LLENO
2 Reyes 4:6: Y sucedió que cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme otra vasija. Y le respondió: No hay más vasijas. Entonces el aceite cesó.

- Este ejemplo nos muestra que mientras hubo vasijas disponibles, hubo aceite para llenarlas. Este es el tipo de vaso que urgentemente se necesita en las iglesias. Vasos que no se enfoquen simplemente en la apariencia sino que se preocupen en una llenura real y total.

9. VASO FRÁGIL
1 Pedro 3:7: … dando honor a la mujer como a vaso más frágil y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no sean estorbadas.

- Este vaso parece insignificante, pero Pedro está diciendo, que posiblemente la respuesta de muchas oraciones están estancadas y/o estorbadas por falta de un mejor uso de ese vaso frágil.

10. UNA CITA CON EL ALFARERO
IR AL LUGAR INDICADO.
- Jeremías 18:2: Levántate y vete a casa del alfarero, y allí te haré oír mis palabras. Dios siempre es específico, Él nos invita a la cita, siempre busca la interacción con nosotros. A veces visitamos todos los lugares menos el que verdaderamente necesitamos visitar. En esta primera etapa de la cita Dios solo ha dicho que nos hablará, que nos hará oír sus palabras.

SER PUNTUALES – NO FALTAR.
- Jeremías 18:3: Y descendí a la casa del alfarero, y he aquí que él trabajaba sobre la rueda. Podemos entender que cuando descendemos a la presencia de Dios, nos damos cuenta de lo que Él está haciendo, entendemos que Dios está trabajando. En esta segunda etapa de la cita, ya no simplemente escuchamos a Dios, sino que lo vemos trabajando.

RESTAURACIÓN Y TRANSFORMACIÓN DEL VASO
DESPUÉS DEL PROCESO
- Jeremías 18:4-6: 4 Y el vaso de barro que hacía se dañó en la mano del alfarero, pero el alfarero volvió a hacer otro vaso según le pareció mejor. 5 Entonces vino a mí la palabra de Jehová, diciendo: 6 "¿No podré yo hacer con vosotros como hace este alfarero, oh casa de Israel?, dice Jehová. He aquí que vosotros sois en mi mano como el barro en la mano del alfarero, oh casa de Israel.

- Tenemos que tomar en cuenta que la asistencia a la cita es voluntaria. Los necesitados somos nosotros y somos quienes debemos acudir a Él. (Acercaos pues a Dios, y Él se acercará a vosotros. Santiago 4:6)

- Luego de estar en el lugar indicado y después de haber hablado, entonces se procede a efectuar el propósito por el cual hemos sido citados. El alfarero empieza a darnos la forma que necesitamos y para llevar a cabo este proceso, existen dos etapas: Restauración y Transformación del Vaso.

- Restauración del Vaso: Restauración, es llevar a su estado original algo o alguien que había perdido su forma. En esta etapa es cuando el vaso cae y se rompe, el alfarero lo levanta y empieza a hacerlo de nuevo, pero solo le devuelve la forma que tenía.

- Transformación del Vaso: Transformación, es darle a algo o alguien una forma diferente a la que tenia. En esta etapa es cuando el vaso ya no simplemente es restaurado sino que es hecho con una nueva forma. En el proceso no simplemente somos restaurados, sino que somos transformados y que la forma que Dios nos da es inigualable a la que teníamos antes. “Cuando Entremos al Proceso Nunca Más Seremos Iguales”.




CONCLUSIÓN
Se espera con el desarrollo de este estudio haber aportado de manera sencilla a un nuevo conocimiento en lo relativo a este tema y de manera amplia a que cada lector sea edificado y transformado por el contenido del mismo.

Como pauta final quiero resaltar que Dios no hace acepción de personas, sino que somos nosotros que por medio de la gracia y la búsqueda de Dios, logramos alcanzar un lugar diferente a los demás (Hebreos 4:16: Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que alcancemos misericordia y hallemos gracia para el oportuno socorro). De acuerdo a tu llamado y de tu fidelidad con Dios, tú decides Qué Tipo de Vaso Eres.

Ahora bien, como dice 2 Corintios 4:7: Con todo, tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros. Reconocemos que somos imperfectos y frágiles, pero Dios ha depositado en nosotros el tesoro del evangelio, para que lo llevemos a todo lugar y toda persona, sin importar el tipo de vaso que sea, pero sobre todo que cada día reconozcamos que de Él es el Poder y la Gloria,